Adoptar un perro en Navidad

En estas fechas  tan próximas a la Navidad, muchas personas se plantean como una buena opción de regalo el comprar o adoptar un perro.  Los expertos recomiendan tener en cuenta varios puntos importantes antes de dar el paso.

La compra y adopción de animales es una decisión que requiere de un compromiso, y lo que pudiera parecer un acto solidario, a veces puede convertirse en una pesadilla, y quien se lleva la peor parte es el animal adoptado, apuntan las asociaciones protectoras de animales.

Preguntas que los expertos aconsejan plantearse antes de regalar o adoptar un perro:

¿Regalo el perro para satisfacer la ilusión de un niño?

A los niños les hace ilusión compartir sus vidas con un perro o agrandar la familia, un tierno sentimiento que muchos hemos tenido, comprometiéndose a pasearlo a diario y hacerse cargo de él. Hay que tener en cuenta que aunque su intención es buena, los niños no son suficientemente maduros para tomar esta decisión y asumir la responsabilidad. La decisión de tener un perro o cualquier otro animal debe ser de común acuerdo con todos los miembros de la familia, para la feliz convivencia con el animal.

¿Qué tipo de perro adopto?

La Navidad no ha de ser la excusa para adoptar un perro de determinada raza, de la cual desconocemos sus características y sus necesidades no se puedan cubrir adecuadamente. Según explica  José Luis Torres, veterinario de la Socieddad Protectora de Animales y Plantas de Madrid, “este planteamiento suele ser uno de los errores más habituales entre los adoptantes de perros”.

Otro frecuente error es adoptar un perro cuando no se dispone del suficiente tiempo libre para cuidarlo. Un perro es un ser vivo con necesidades y una de ellas es la de hacer ejercicio. Hemos de ser conscientes de ello antes de planear agrandar la familia.

¿Es el  perro un regalo sorpresa?

No es recomendable regalar un perro a alguien que no ha planeado si quiera tenerlo o que aunque lo haya pensado alguna vez, no está preparado todavía. Tener una mascota requiere de una previa planificación. Analizar si se dispone de tiempo, espacio y si seguirá siendo así en un futuro y además es necesario  consultarlo previamente con todos los miembros del hogar, como ya comentábamos. “Estos regalos sorpresa acaban en abandono” afirma Torres.

Otro punto a tener en cuenta al adoptar un perro en Navidad es el dejarse llevar y relajarse demasiado por el hecho de estar de vacaciones. Torres advierte que “es un error que el perro adoptado en vacaciones pase todo el tiempo acompañado, porque cuando se retoma la rutina, no estará acostumbrado a la soledad y podría desarrollar problemas de conducta.

 

Las navidades pueden ser también un buen momento para planificar la vida futura con nuestro nuevo amigo, teniendo en cuenta los horarios reales de los miembros de la familia y así poder cubrir sus necesidades. Y como miembro de la familia que es podremos cuidarlo como tal, con cariño y respeto. Ellos te lo agradecerán toda la vida.

Fuente: consumer.es