Cuando un animal padece una patología que le impide moverse con normalidad, no sólo es necesario cuidar de las partes afectadas, también debemos tener en cuenta otras consideraciones que afectan al animal en su conjunto y que interfieren en su calidad de vida y en su recuperación.
1. LA HIGIENE
Debemos mantener la piel del animal fuera de contacto con heces y/u orina. Podemos lavar con suero fisiológico o toallitas especiales para perros. Las toallitas para bebes, pueden irritar, ya que el pH cutáneo de humanos y perros es diferente.
2. LA ALIMENTACIÓN
Los estados patológicos provocan un desequilibrio nutricional. Una buena nutrición es VITAL para la recuperación del animal. Deberás dejarte aconsejar por el veterinario sobre cuál es la mejor dieta para el perro. Se debe tener en cuenta que muchas veces hay otras enfermedades a parte del de la parálisis y deberemos alimentar en consecuencia. Por ejemplo, en animales mayores es muy frecuente que haya problemas renales. Gran parte de su tratamiento se basa en una alimentación específica (baja en proteínas y fósforo), indispensable para intentar frenar dicha enfermedad. También es muy probable que el veterinario quiera combinar dos tipos de alimentación o añadir algún suplemento para poder abarcar ambas enfermedades.
3. LAS ÚLCERAS DE DECÚBITO
Las úlceras de decúbito suelen formarse en las zonas que más sobresalen del cuerpo, como en codos, tobillos, caderas y hueso periocular. Son debidas, tanto al apoyo constante de esas zonas como a el déficit nutricional que provocan las enfermedades graves. Para evitarlas es vital cambiar la posición del animal cada pocas horas y utilizar terapias de fisioterapia pasivas (es decir, que el propietario mueva las extremidades del animal. Podemos ayudar a sanar estras heridas con pomadas cicatrizantes e hidratantes: Centella asiatica y Aloe vera.
4. PROTEGE SU PIEL
Existen pañales especialmente diseñados para perros que, además de absorber ayudar a que la orina y las heces no irriten su piel y de paso ahorrarte unos disgustos en el suelo o las alfombras. Es muy importante revisar el pañal frecuentemente y cambiarlo siempre que sea necesario. Debemos ser especialmente cautelosos cuando el perro está en ambientes al aire libre, ya que existe la posibilidad que las moscas dipositen huevos sobre los lugares sucios de su piel, el perro al tener problemas de movilidad no podrá ahuyentarlas. Siempre que el animal deba salir, quítale el pañal para que su piel pueda "respirar" y la humedad no le provoque úlceras. Puedes usar también empapadores para poner encima de su cama.
5. EVITA EL ARRASTRE
Es la forma más común en que aparecen las heridas. Éstas son complicadas de solucionar porque el animal siempre tenderá a apoyarse sobre ellas. Por ello, deberás evitar que aparezcan. Existen abrigos protectores para evitar el contacto de animal con el suelo.
6. CUIDA SU PIEL
Si son necesarios baños frecuentes, recomendamos utilizar chamús especialmente formulados para perros alérgicos, ya que éstos no destruyen la barrera lipídica protectora y se pueden usar hasta varias veces por semana. También podemos ayudar a la piel dando suplementos para reforzarla, como los ácidos grasos omega-3 y algunas vitaminas. Consulta con tu veterinario, hay muchas formulaciones disponibles.
7. VIGILA SU VEJIGA
Muchos perros con parálisis tienen problemas para miccionar. Algunos son incapaces de contener la orina y ésta va saliendo a gotitas y otros son incapaces de vaciar la vejiga y el propietario debe hacerlo por él, unas 3 veces al día. Mantener una buena higiene de la micción ayudará a impedir las infecciones de orina, frecuentes en estos casos. Será importante también ser muy observador para poder detectar cambios en el olor y/o el color de la orina, lo que nos podría indicar que puede haber algún problema.
8. SILLAS DE RUEDAS
Si el animal conserva fuerza en las extremidades anteriores, el uso de una silla de ruedas canina puede ser muy beneficioso: evitaremos en gran medida las úlceras de decúbito, fortaleceremos el cuerpo del animal, ayudando a ganar masa muscular y, sobretodo, ayudaremos a su bienestar mental, proporcionándole esa autonomía que tanto desean los perros. Se recomienda consultar con el veterinario sobre la idoneidad del uso de la silla de ruedas en cada caso.
9. LA FISIOTERAPIA
Masajea a tu perro. Los masajes aumentan la circulación sanguínea, ayudan a reducir el dolor y fortalecen el vínculo con el propietario. Mueve suavemente las extremidades, sin forzar. De esta manera evitarás que las articulación en se rigidicen debido a la inmovilidad. Tienes más información aquí. Siempre que se pueda, podemos utilizar arneses delanteros, traseros o completos para ayudarle a caminar y permitirle cierto movimiento activo. Hay profesionales que acuden a domicilio para realizar técnicas de fisioterapia y existen centros veterinarios en España donde se aplican estas técnicas. En muchos casos, es muy interesante la hidroterapia ya que les permite poderse mover sin necesidad de aguantar su peso. Par hacerla, es indispensable el uso de chalecos salvavidas.
10. ¡PASEA!
Cuando sea posible, compartid paseos al aire libre, ya sea con arneses especiales, sillas de ruedas, mochilas o carritos. Los perros son seres olfativos. NECESITAN oler ambientes cambiantes y a otros animales para tener una buena salud mental. Que la parálisis no sea una excusa para privarle de ello: verás como anímicamente se nota much el cambio y eso, obviamente se reflejará en su salud física.